
Devendra Banhart and The Grogs (US)
Su nombre es sinónimo de Indra, el dios hindú del rayo y el trueno. Y no hay duda que, desde que se dio a conocer en el 2002 con una serie de grabaciones tan misteriosas como magnéticas y encantadoras, Devendra hizo honor a su nombre.
Con apenas 29
años, y 7 discos editados, es uno de los responsables de que el folk haya vuelto a imponerse y
de que el hippie-chic no sea sólo una tendencia urbana, sino una manera de
presentarse en el mundo, personal y sofisticada a la vez. Había algo en él
-en su voz embrujada, en sus
facciones particulares, en su vestimenta colorida- que lo hacían
instantáneamente atractivo para el público y la gran industria, que desde hacía
años esperaban un artista que conectara
con lo latino pero de una forma no estereotipada.
De madre
venezolana, Devendra Banhart nació en
Texas, pero vivió hasta los nueve años en Caracas, Venezuela, lo que le
permitió entender de primera mano ese mundo mágico y caliente que lo crío y que
él luego mezcló con su condición anglosajona. Así es que en sus
composiciones pueden apreciarse influencias del primer Bowie acústico o Marc Bolan, pero también de Atahualpa Yupanqui,
Caetano Veloso o los míticos Os Mutantes, de quienes tomó su psicodelia y el
gusto por lo mágico y alegre.
Devendra lleva editados 7 discos de estudio y
decenas de videos, en
donde dio rienda suelta a su gusto por el cine, la fotografía y a su manejo
artístico de la imagen, siempre relajada y sensual. Prueba de ello son las
portadas de sus álbums y video-clips
como "Baby" y "Carmesita" (con la participación de su ex novia Natalie
Portman).
Además de hacer giras por clubs y teatros, Devendra ha participado de prestigiosos festivales en Estados Unidos y Europa como Coachella (2006 y 2009), Bonnaroo y los ingleses Glastonbury y Isle of Wight.
Ha curado su propio mini-festival en el club Cid de Los Angeles bajo el
nombre "Hypnorituals and Mesmemusical Miracles Hanging in the Sky: 5
Nights of Soleros and Bandoleros", y fue curador en 2006 del festival All Tomorrow Parties en Londres. En 2007 lideró el cartel de Welcome To Dreamland en el Carnegie Hall de New York, curado por David Byrne, junto a Vetiver, Vashti Bunyan y Coco Rosie.
En lo estríctamente
musical, Devendra es un autodidacta
hiper creativo que desde muy chico desarrolló un amor verdadero por la
música folk y las enseñanzas sensoriales del folk más psicodélico. Sus primeros
discos, "Oh me oh my" (2002), "Rejoicing
in the hands" (2004) y "Niño Rojo" (2004), los grabó de manera
artesanal y se convirtieron en inmediatos éxitos de la escena alternativa de
Estados Unidos, que se rindió ante el estilo
cautivante y enigmático de Devendra y su renovado uso de la instrumentación
hindú y psicodélica. "Cripple Crow" (2005), su cuarto disco, fue otro gran paso
adelante, ya que allí grabó junto a una banda de una manera todavía
más acabada, y temas como "Quédate luna"
y "I feel just like a child" se convirtieron en clásicos de sus recitales. El disco fue
aclamado por la crítica y le permitió participar de lo que se dio a conocer
como freak-folk, una movida surgida en Los Angeles que
buscaba revitalizar el folk, el hippismo y la psicodelia de fines de los
sesenta pero desde las posibilidades y la mirada del presente.
"Smokey Rolls Down Thunder Canyon" (2007) y "What Will Be" (2009), sus siguientes discos, lo mostraron aún más
consolidado en su estilo, pero incorporando elementos pop, funk y soul
impensandos en sus inicios y que se amalgaron perfectamente bien en su música.
Con "What Will Be", editado por
Warner, Devendra Banhart alcanzó estatus internacional, pero sin perder la
naturalidad de la que siempre fue parte. Por eso cuando se
le pregunta cómo vive el éxito, responde:
"Nunca esperé nada de esto. Siempre supe que lo que estoy experimentando es producto del momento. El punto para mí es hacer música y hablar de ella. Estudié en una escuela de arte de San Francisco donde aprendí todas las disciplinas excepto la música. Pero luego me di cuenta de que en vez de ir a clases prefería quedarme en casa tocando la guitarra. Fue una cuestión muy orgánica. Supe que si no era yo mismo me iba a morir. Si no eres honesto con tus canciones o con lo que le estás dando al mundo, tu cosecha se pudrirá. No importa dónde nazcas, lo que importa es que tú seas tú".
"Nunca esperé nada de esto. Siempre supe que lo que estoy experimentando es producto del momento. El punto para mí es hacer música y hablar de ella. Estudié en una escuela de arte de San Francisco donde aprendí todas las disciplinas excepto la música. Pero luego me di cuenta de que en vez de ir a clases prefería quedarme en casa tocando la guitarra. Fue una cuestión muy orgánica. Supe que si no era yo mismo me iba a morir. Si no eres honesto con tus canciones o con lo que le estás dando al mundo, tu cosecha se pudrirá. No importa dónde nazcas, lo que importa es que tú seas tú".